La zanahoria es la hortaliza más sensible a la competencia con las malas hierbas, por tanto la protección durante las primeras fases es fundamental si queremos que crezcan fuertes y sanas. Es esencial mantener controladas las malas hierbas durante las primeras semanas. Realice limpias superficiales con un azadín o un azadón. Limpias profundas pueden lastimar las raíces, así que ¡mucho cuidado!
Lo ideal para realizar el cultivo de la zanahoria es hacerlo en una mezcla de tierra compuesta por fosfato y potasio, no obstante si no se dispone de esta mezcla, se puede sustituir por una combinación de estiércol o compost pero hay que hacer la mezcla de la tierra por lo menos unos 6 meses antes de plantar las semillas.